HOSTIGAMIENTO INFANTIL
(PARTE I)
Por Dra. Patricia García Mora
Terapeuta Familiar en Supera
En la actualidad se ha descubierto que mucho del sufrimiento infantil se debe al hostigamiento que reciben de otros.
Es tiempo de estar alerta a esto y por lo mismo se considera importante conocer sobre este tema, el cual revisaremos en varias sesiones.
Los estudiosos de este tema nos indican que el hostigamiento infantil (conocido por su término inglés bullying) es una especie de martirio, metódico y sistemático, en la que el agresor sume a la víctima, a menudo con el silencio, la indiferencia o la complicidad de otros compañeros.
El hostigamiento infantil (bullying) es cualquier forma de maltrato psicológico, verbal o físico producido entre niños y adolescentes de forma reiterada a lo largo de un tiempo determinado. Estadísticamente, el tipo de violencia dominante es el emocional y se da mayoritariamente en el aula y patio de los centros escolares. Los protagonistas suelen ser niños en proceso de entrada en la adolescencia (12−13 años), siendo ligeramente mayor el porcentaje de niñas en el perfil de víctimas.
Profesionales de la salud y comportamiento social, han definido el término ‘bully’ como las personas o niños que se comportan agresivamente hacia los demás, repetidamente. Según los expertos, este tipo de comportamiento puede tener consecuencias graves en edades tempranas ya que aquellos que sufren los enfrentamientos agresivos de otros niños, pueden experimentar baja autoestima y depresión, mientras que los niños que propician los enfrentamientos podrían continuar involucrados en conductas anti-sociales incluso más destructivas cuando llegan a ser adolescentes y adultos.
El objetivo de la práctica del hostigamiento infantil es intimidar, apocar, someter, amilanar, amedrentar y consumir, emocional e intelectualmente a la víctima, con vistas a obtener algún resultado favorable para quienes acosan o satisfacer una necesidad imperiosa de dominar y someter que pueden presentar los acosadores como patrón predominante de relación social con los demás.
En ocasiones, el niño que desarrolla conductas de hostigamiento hacia otros busca obtener el reconocimiento y la atención de los demás llegando a aprender un modelo de relación basado en la exclusión y el menosprecio de otros.
Con frecuencia el niño que acosa a otro suele estar rodeado de un grupo de acosadores que se suman de manera unánime y gregaria al comportamiento de hostigamiento contra la víctima.
Se han descrito hasta 8 modalidades de hostigamiento infantil, con la siguiente incidencia entre las víctimas:
- Bloqueo social (29,3%)
- Hostigamiento (20,9%)
- Manipulación (19,9%)
- Coacciones (17,4%)
- Exclusión social (16,0%)
- Intimidación (14,2%)
- Agresiones (13,0%)
- Amenazas (9,1%)
Conviene poner atención a estas categorías que se ofrecen y determinar a qué tipo de hostigamiento puede estar expuesto nuestro hijo.