La educación requiere autoridad

LA EDUCACIÓN REQUIERE AUTORIDAD

Por Dra. Patricia García Mora

Terapeuta Familiar en Supera 

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La falta de autoridad dentro de la familia deteriora el papel de la misma como núcleo básico de la sociedad. Asimismo, perjudica la formación de los hijos para que logren tener una vida adulta de provecho y además, se perjudican las siguientes generaciones, ya que al educar un hijo se está educando indirectamente a sus descendientes también.

Es muy importante entender que se requiere un ejercicio correcto de la autoridad. Cuando los padres no tienen reglas en casa y no marcan límites claros a sus hijos están dejando de cumplir con su obligación formadora de un ser humano, al cual invitó a vivir.

En el ejercicio compartido de la autoridad es necesario tener en cuenta:

  • Establecer previamente unas reglas de juego. Éstas deben ser normas aceptadas por todos y exigibles también para cada miembro de la familia, sin excepción. Si hay normas solamente para los hijos, en cuanto vayan creciendo dejarán de aceptarlas porque han visto que cuando se es mayor no son cumplidas.
  • Exigirse a sí mismo en lo que se quiere exigir a los otros. Lo que no se esté dispuesto a cumplir no es posible exigirlo de los demás.
  • Ponerse de acuerdo con el otro cónyuge, o con quien comparte la educación de su hijo. Esto es de suma importancia, ya que si las partes que se colocan como autoridad frente al niño no están caminando hacia un rumbo acordado, eso confunde al hijo y no se formará con una autoridad que le permita un desarrollo sano de su personalidad.
  • Participación y la responsabilidad es algo que se modela, si los niños no lo observan en sus padres difícilmente podrán formarse bajo esos conceptos.
  • Resistir y mantenerse firme frente a las dificultades y a frustraciones. Cuando las situaciones se muestran difíciles los niños observan de qué manera reaccionan sus progenitores. Esa es una enseñanza que más tarde aplicarán cuando ellos se encuentren en las mismas circunstancias.
  • Destacar siempre lo positivo. Todas las situaciones tienen una parte negativa y otra positiva, al igual que las personas. Es importante enfocarse en esta última, ya que es lo que puede colocar un fuerte cimiento en la personalidad, que cobrará seguridad y podrá mantenerse fuerte cuando las circunstancias se muestren adversas.
  • Ejercitar la autoridad no implica autoritarismo y violencia….se requiere sólo firmeza, la cual debe acompañarse con el afecto. La ternura y la firmeza son las claves para educar la personalidad de un hijo.

Es importante entender que el ejercicio de la autoridad, a través de la fijación de reglas y límites, es dinámica, es decir, no puede permanecer con las mismas exigencias durante el desarrollo de la personalidad del hijo. Se requiere aprender a usar la flexibilidad y la comprensión, de acuerdo a la edad del niño.

¡CUÁNTAS PREGUNTAS!

 Por Dra. Patricia García Mora 

Terapeuta Familiar en Supera 

CUANTAS PREGUNTASLlega una edad de los niños, entre los dos y tres años, que tal pareciera que se vuelven investigadores de tantas preguntas que hacen. Esto pone a prueba a los padres y adultos que rodean al niño. Las preguntas se hacen sobre todos los temas y a cualquier hora y en muchas ocasiones asaltan sin encontrar la respuesta. Es increíble a veces cómo de una pequeñita cabeza puede surgir una pregunta de tan difícil respuesta, por ejemplo ¿ por qué el sol es sol?, ¿por qué la mañana es con luz y la noche es oscura?

Los pequeños disparan todo tipo de preguntas, sobre todo a sus padres. Ellos consideran que deben saberlo todo y además de quienes esperan todo tipo de enseñanzas y soluciones a las dudas que tienen del mundo en donde habitan. Por eso, es tan importante contestar todas sus preguntas, por muy absurdas que parezcan. Su deseo de conocer es la forma que tienen para enfrentarse a la vida cuando sean adultos.

Por absurdas complicadas que sean sus preguntas, y aunque planteen las mismas dudas una y otra vez,  o aunque agobien con su insistencia,  los padres deben prestarles toda su atención si desean colaborar con su desarrollo. Es además una manera de establecer un vínculo de comunicación muy importante.

Además de buscar las respuestas adecuadas, es indispensable cuidar la actitud. Una sonrisa burlona puede bloquear al pequeño. También, si perciben desesperación en sus padres, ellos aprenderán que no es bueno preguntar y se quedarán con sus dudas o buscarán a alguien más que se las despeje. Esto ocasiona una pérdida en la relación.

¿Por qué tantos por qué?.  Los especialistas en el desarrollo infantil afirman que estos continuos “por qué” indican que el niño se está desarrollando apropiadamente , así como la relación con sus padres.

La curiosidad  de los niños surge incluso antes de empezar a hablar. La manipulación de los objetos, su afán por investigar el mundo que les rodea, su necesidad de llevarse todo a la boca responden a un deseo de satisfacer sus dudas. Todo ello es una exploración que se facilita cuando comienzan a hablar cuentan con el lenguaje.

Otro motivo más por el cual los niños hacen preguntas constantemente es porque requieren practicar la comunicación. Al empezar a hablar ellos hacen miles de ensayos e Imitan la entonación, el ritmo de las frases, las nuevas palabras. Esta es la razón por la cuál a veces preguntan y se van sin esperar la respuesta. No es tanto la duda en este caso, sino la necesidad de expresarse y lo hacen imitando a los adultos, que sin darse cuenta se mantienen haciendo también preguntas.

Cuando de verdad se muestran dudosos es porque ellos se percatan de que todo tiene un origen y una consecuencia y el azar no es algo que puede asimilarse aún. Por eso quieren saber por qué el cielo es azul, por qué llueve y quién es el responsable de todo eso.

Es importante saber que no se tienen que tener todas las respuestas con profundo conocimiento, pero sí que deben ser apegadas a la verdad. Si no se conoce sobre lo que se está preguntando, lo más fácil es llevarlo a que juntos busquen la respuesta. Esto también les enseñará que el conocimiento está al alcance de todos si se sabe buscar.

Algunas sugerencias para dar respuestas a estos pequeños preguntones son las siguientes:

  • Es de mucha utilidad hacer comparaciones con cosas que el niño ya conoce y darle ejemplos que le resulten familiares.
  • Procure contestar solo lo que le está preguntando. A veces se dan respuestas a cosas que el niño no ha alcanzado a comprender y se confundirá con una respuesta a algo no preguntado en ese momento.
  • Las respuestas siempre deben de ser cortas, claras y sencillas.
  • Tenga especial cuidado de nunca ridiculizar sus dudas. Mostrar interés por lo que dice es el mejor favor que se le puede ofrecer.

Esta etapa es corta y puede ser muy enriquecedora porque muchas de las preguntas que los niños hacen tal vez jamás se había presentado como una duda en la mente del adulto. Es una oportunidad de seguir aprendiendo. También es una parte de la vida de su hijo que deja muchos recuerdos y que el día de mañana podrá comentar con él ; se divertirán mucho y volverán a afianzar su relación .Con seguridad le estará muy agradecido por su paciencia y disposición .

Si se había preguntado por qué tantos por qué…aquí tiene la respuesta.