¡NO TE VAYAS!

¡NO TE VAYAS!

 Por Dra. Patricia García Mora 

Terapeuta Familiar en Supera 

NO TE VAYASLlantos y gritos angustiosos del niño cuando se separa de sus padres, es una situación ante la cual todos los padres se enfrentan en algún momento. Depende de ellos el que el niño aprenda a manejar esta situación de separación de una manera tranquila .

Para mejor entender esto, es conveniente saber que en el mismo instante en que el hijo nace se establece un vínculo afectivo muy poderoso e importante para su desarrollo. El niño requiere de muchos cuidados para sobrevivir y la presencia de sus padres, o personas significativas, es indispensable en su vida. Esta situación provoca lazos tan fuertes que se manifiestan como una dependencia, lo que debe, con el tiempo, ir disminuyendo para lograr que  el infante adquiera su autonomía.

Durante los primeros meses de vida, el pequeño aún no ha aprendido a almacenar en su mente la imagen de los objetos y personas que ve. Por esta razón, cuando no los ve, piensa que han desaparecido para siempre. Ello permite entender la ansiedad que manifiesta el hijo cuando los padres se alejan. Sin embargo, este mecanismo va despareciendo en la medida que el niño se va desarrollando.

El problema es “aguantar” los llantos del niño cuando la mamá o el papá se alejan. Si el niño llora y los padres ceden , aprenderá que de esa manera podrá evitar que sus padres desaparezcan. De esta manera puede evitar que sus padres salgan de casa sin él; se negará a asistir a la guardería o maternal y se resistirá a dormir solo en su cama. El niño tratará de evitar en la medida de sus posibilidades que se alejen de èl; y como la mejor forma que tiene para manifestarse – y además le da resultado – es llorando, hará uso de ello sin duda alguna.

Cuando los llantos de un niño son exagerados, habrá que pensar que no se ha estado manejando la situación adecuadamente. Puede ser que no se haya trabajado suficientemente para la separación gradual.

¿ Cómo puede conseguirse esto?

Pueden propiciarse separaciones, primero breves y cada vez un poco más largas, diciéndole siempre que se van por un rato y cuándo se tiene previsto volver. Al principio no va a aceptarlo con agrado, pero poco a poco, cuando se dé cuenta de que separación no significa abandono, lo irá asumiendo.

Es importante aprender a controlar la ansiedad, porque ésta es contagiosa. Muchas veces son los padres los que no quieren alejarse de su hijo y manifiestan angustia cuando se despiden. La sobreprotección puede generar en el hijo una inseguridad tal que le evitará desarrollarse de manera independiente. El niño empieza a saber lo que es la angustia, más por lo que  sus padres expresan que por lo que él siente ante una determinada situación. Es conveniente que los adultos aprendan a controlar sus emociones, de lo contrario, enseñarán a su hijo a vivir en continuo sobresalto y temor. Si sus padres temen – piensa el niño – es que algo muy malo en verdad debe estar sucediendo.

Otra forma de prevenir las angustias de la separación es evitar desde las primeras semanas que el bebé duerma con sus padres. Es positivo para él tener su propia habitación y acostumbrarse a ser independiente. Le permitirá adquirir seguridad el crecer sabiendo que, aunque no pueda ver a sus papás, ellos están ahí cerca, pendientes de él y que cuenta siempre con su amor y su apoyo. Si el bebé se enferma, es preferible que alguno de los padres se traslade a la habitación de su hijo, a llevárselo a la suya. Esto puede ocasionar molestias pero serán mientras el niño se recupera; de otra forma pasarán muchas noches para que logren convencerlo de volver a su propia cama.

Jugar es ensayar a vivir. Juegue a las escondidillas con su hijo desde que está muy pequeño. Escóndase usted y permita que él se esconda. Así se irá dando cuenta que el no ver algo no significa que se haya desparecido .

Déjelo por espacios cortos en casa de los abuelos o tíos y avísele que se va y que asegúrele que regresarà. Cuando el niño se de cuenta que cumple su palabra, empezará a sentirse seguro.

Por supuesto que la vida puede colocar al niño en situaciones de estrés, como la muerte de un ser querido, un divorcio o un accidente que provoquen una separación brusca y verdadera. En estos casos hay que proveerle de amor suficiente pero procurando que la vida no le cambie demasiado. Los niños son fáciles de adaptar a nuevas situaciones si a su alrededor existen comportamientos que le ayudan .

Uno de los objetivos de la formación de un hijo debe ser el fomentar la autonomía personal del mismo. Esto se puede lograr haciendo que sea más competente, es decir, que aprenda nuevas cosas cada día. El enseñarle a mejorar sus habilidades y brindarle la seguridad de ser amado, le ayudará a desarrollar su autoestima y a enfrentarse a la separación de sus padres con seguridad y sin temores.

Enseñar cosas nuevas a los niños, como comer solos, peinarse, cepillarse los dientes e ir al baño, implica tiempo y dedicación. Los padres, a veces, se encuentran tan ocupados que no dedican el tiempo suficiente para que el niño domine estas acciones y prefieren hacerles todo. Piensan que así, no pierden su valioso tiempo, pero en realidad lo están gastando lastimosamente. El tiempo que dediquen a la enseñanza de ser independiente es una buena inversión para el futuro del hijo. Hay que permitirle que participe en las tareas cotidianas y que aprenda a resolver sus problemas y a superar pequeñas metas. Día con día, paso a paso, llegará a grandes logros.

No se trata de esperar a que aprenda solo, sino a acompañarlo y apoyarlo en el aprendizaje e irse retirando poco a poco, hasta estar seguros que puede por sí mismo. Cuando llegue ese momento, recuerde reforzar y valorar lo que ha hecho.

La dependencia no es algo que permite un buen desarrollo en el niño. Es importante crear situaciones en las que el niño vaya aprendiendo a alejarse de los padres y valerse por sí mismo. Todo bajo la vigilancia de sus progenitores, pero a una distancia suficiente con el fin de que él saque sus propios recursos para afrontar las situaciones.

Si a pesar de emplear diversas formas para preparar al hijo a ser independiente, este sigue mostrando graves dificultades para alejarse de sus padres y actuar con autonomía, es importante que se consulte a algún especialista.